MI BLOG

Hola, bienvenidos a mi blog.

Este es mi rinconcinto, en el que no hablo de política, ni de religión..... ni de temas espinosos.
Solo lo uso, para contar mis ilusiones, mis sueños, mis tonterías, mis momentos, mis fantasías .... según me dé. Mis días buenos y mis días malos.
Algo distinto..... en el que me expreso, tal y como soy.

Espero que os guste.

jueves, 9 de mayo de 2013

SOLO UNA VEZ MAS




     Esa mañana, Ana, estaba muy nerviosa. No había pegado ojo en toda la noche.... imposible !.

     Y es que lo que le contó su compañera, el día de antes, le trajo recuerdos. O mas bien, los reavivó.

     Rosa, le había contado, que llevaba tiempo acordándose de su antiguo novio, y que un día, sin pensarlo, cogió el coche, y fue a buscarlo a su pueblo... después de varios años sin saber nada de él.

     Ana, nunca había olvidado a su gran amor... al que se hincó en el corazón... al que la hizo soñar, reir, vivir, disfrutar, ilusionarse....
    Como tampoco pudo olvidar,  aquel día, de hace 25 años,cuando después de varios años de relación,  él le dijo que no podía ser, que la distancia no permitía que fueran felices, y que él quería hacer su vida .
   
    Aún guardaba en una caja, todas las cartas que él le mandó, durante su relación. Y las pocas fotos que le quedaron. Como si fuera, un tesoro secreto y escondido. Tantas palabras escritas, y tanto amor en unas letras...



                                       





     Todavía le dolían aquellas palabras... todavía notaba como se le encogía el corazón, como aquel día que él se fue, y nunca volvió a saber de él.. salvo por familiares de ella, que vivían en la misma ciudad.

     Esa noche, Ana... recordaba los meses posteriores a que él la dejara... y como su vida, se convirtió en un desastre de devaneos y locuras, que no le llevaron a buen puerto, hasta que conoció al que era su marido.

     Unos años después, de que Jose la abandonara, ella conoció a Pablo... se enamoró, y acabó casándose con él.
     Ya llevaban 20 años casados, y tenían tres hijos. Solo que los años, como en muchas parejas, había hecho brecha, y no eran lo felices que debían de ser.
      Eran una familia, pero estaban mas tiempo cada uno por su lado, que juntos.
      Muchas veces, Ana, comentaba, que con su marido compartía tres hijos, y una hipoteca. Triste.. pero así lo sentía.

      Durante todo ese tiempo de casada, ella .... muchas veces, cuando se quedaba a solas , por la noche, en la cama... en el silencio.. aún se acordaba de Jose. Aún echaba de menos sus caricias y sus besos.... Y tantas y tantas noches se preguntaba, que sería de su vida.











      Aquella noche de desvelo.... Ana sintió envidia del valor de Rosa. Y se le pasó por la cabeza.... buscarle... saber de él... como le iba... Y siendo sincera.., necesitaba volver a escuchar su voz, una vez mas, aunque fuera solo una. No quería que se le pasara la vida, sin volver a saber algo de él.

      Esa mañana... al igual que toda la semana, Ana no cesaba de darle vueltas.. estaba triste, y esa historia contada por su amiga, le hizo remover algo en su corazón.
      Pero decidió armarse de valor.... no podía seguir así. ¿Que de malo tendría buscarle?... Solo quería saber como le iba la vida, que había sido de él... si había tenido hijos...
      O eso es lo que ella quería pensar. Sabía muy bien, que en el fondo de su corazón, se moría por oir su voz, y no por simple curiosidad.

      Habían pasado casi 10 días... y decidió hacerlo.

      Llamó a su familia, mediante la cual le conoció cuando era joven... y en conversación con su prima.. disimulando.. le preguntó algo así como..

      . ¿Y de Jose y su familia? ¿sabes algo?...

      Entonces, la prima, comenzó a largar por la boca. Le contó, que Jose, se había ido a trabajar a Huelva. Era doctor en un hospital de allí. Le contó que el resto de la familia, seguía viviendo a dos calles de su casa.. y que su ex-cuñado, seguía trabajando en el mismo banco de siempre.

      Con esa información tuvo bastante. Buscó en internet, el número de teléfono del banco donde trabajaba su ex-cuñado, y armándose de aire... le llamó.

      Le temblaban las manos... le temblaba la voz... entre otras cosas, porque no sabía ni que decirle. Pero tras la sorpresa del susodicho, charlaron un rato, y le dió el teléfono de Jose. Ella le pidió por favor, que no le dijera nada, que quería darle una sorpresa.

      Y desde luego, se la iba a dar. Ahora, solo tenía que tener lo que hay que tener, para ser capaz de hablar con él.

      Con el estómago encogido, no sabía si por el miedo o si por la emoción, marcó su teléfono.


      ................. ¿Sí buenos días? .. hola??


    .........................................


    Para Ana, fue algo tan intenso contestarle y decirle que era ella... que apenas recuerda lo que hablaron después. Escuchar su voz, le paró el corazón..... Esa sensación de lagunas en los recuerdos, por el momento de tensión.... no le dejaban recordar.  Pero sabía perfectamente, cómo se quedó él. Sorprendido... sí... asombrado.. también....

    Habían pasado demasiados años, y lo que es cierto, que cuando dejas de hablar con una persona a la que quieres, y vuelves a entrar en contacto.. quieres decirle tantas cosas, que al final, no le dices nada. Había que romper ese hielo que hicieron los años.

    Ana supo que Jose había tenido un hijo, con una mujer con la que nunca se llegó a casar. Pero que lo veía a menudo. Y que ahora vivía solo, en Huelva.
    Ella le contó... su matrimonio.. sus hijos... sus recuerdos...

    En un momento de la conversación, Jose le preguntó, por qué había dejado pasar 25 años para buscarle, ¿porque ahora? decía Jóse.
    Y Ana... siendo sincera, le dijo que lo había pensado muchas veces, pero que jamás se atrevió. Como tampoco se atrevió a preguntarle, porqué no la había buscado él.

    Poco a poco, y a base de llamadas, renació esa amistad perdida.... esas bromas... esa complicidad...

    Se llamaban de vez en cuando por teléfono, y hablaban, horas... La cuestión es que Ana, en el fondo de su corazón, le seguía queriendo, y en ese momento, estaba como metida en una nube. En una nube que la tenía en otra dimensión, y que sabía que le iba a complicar el corazón. Pero no quería dejar pasar la oportunidad, de recuperarlo, aunque solo fuera como amigos.

    Pasó mas de un año, desde que habían retomado esa amistad... cuando Jose, le dijo que iba a viajar a Madrid... y le propuso que se vieran.. después de tantos años.

    Aquella noche, después de la conversación, en la que él le propuso que se encontraran ... Ana, volvió a desvelarse. Deseaba con toda su alma volver a verle, con abrazarle..... Pero sabía, que eso le iba a provocar otras cosas. Ella estaba casada... y sabía muy bien, lo que iba a pasar. Pero tomó la decisión, y le dió igual.... tiró hacia delante... inventó una excusa en casa... y se fue a Madrid.

    Sabía muy bien que eso le iba a remover el alma.. y el corazón... pero no podía dejar pasar esa oportunidad. Quizás, solo una vez mas, en su vida, lo iba a mirar a los ojos.... se iban a abrazar...

    ......................


    El viaje a Madrid, fue espectacular.... iba tan nerviosa, que creyó que se iba a desmayar.

    Jose iba a ir a recogerla a la estación.

    Y así fue.... Cuando bajó del tren, se dirigió a la salida... iba en volandas... y de repente, le vió.. allí... esperándola.

    Estaba cambiado.. mucho... Los años pasan para todos. Pero eran sus ojos oscuros, su sonrisa... él... era él....

    El corazón desbocado, amenazaba con salirse..... Pero el abrazo.. y los dos besos, fue con lo que ella había soñado durante esos 25 años....








    Lo que Ana vivió... solo lo sabe ella. Y lo tiene guardado en su corazón. Pero fueron tantas palabras.... ese paseo.... esa cena.... las risas... Sintió que tenían la misma complicidad que antaño, y eso, le machacaba el corazón.
 
    Aquella noche, se paró el tiempo. Nada sucedía alrededor, solo eran ellos dos. Ninguno pensó en mañana, ni en la semana siguiente.... ni en nada. Simplemente revivieron su amor perdido....
    Volvieron a amarse, como si no hubiera pasado el tiempo. Como si no hubieran pasado 25 años. Y sintieron, que no había nada mas, fuera de aquella situación.

    Cuando él se durmió, Ana cerró los ojos... y rezó... no quería olvidar ni uno solo de los segundos que estaba viviendo con él. Aún sabiendo lo que todo esto le iba a causar.

    Aquel fin de semana, Ana fue tan feliz, que no recordaba haberse sentido así , desde hace muchos años. Y Jose... tan dulce... tan cariñoso.. tan "preocupado".

    Su última conversación, antes de subir al tren de vuelta ... Jose mirandola a los ojos, le dijo... que quizás se habían equivocado. Que se sentía mal, porque ella estaba casada.... y eso, les iba a hacer daño a los dos.
    Ella no dijo nada, porque sabía, que tenía razón.

    Se despidieron, y Ana subió al tren... Fue todo el viaje llorando.... le lloraba el corazón, le lloraban los ojos y le lloraba el alma. Y con ese corazón roto en su mano, sabía, que con que él le hubiera propuesto lo más mínimo... ella se habría ido con él.

    La semana posterior a ese fin de semana, Ana lloró mas que nunca. Esa lucha interna, le partía el corazón.  Jose tenía su vida, y ella la suya..... Pero ella, ya no sabía cual era su vida. No podía destrozar lo construido, por una locura, pero sabía que Jose, no era una locura.

    Pero la vida, hace que a veces, cuando las cosas no pasan en su momento, es porque no tienen que pasar. Jose le hizo ver... Le hizo ver que ella, tenía que estar con su familia. Que no volverían a romper esos lazos, y que se iban a querer siempre... pero cada uno en su sitio.


..................................


    Han pasado 5 años, y los lazos no se han roto... Y yo, aún cuando la veo venir, con los ojos llenos de brillo, y esa sonrisa en la boca, sé que es porque ha hablado con él.

    Escuché sus palabras..... le dí pañuelo para sus lágrimas.... Fui su "todo oídos" .. y aún sigo siéndolo, porque no solo la quiero mucho, sino porque la entendía perfectamente... Porque sé, que cuando se quiere a alguien, con el corazón..... por muchas cosas que sucedan, por mucho tiempo que pase, y por muchos enfados que haya... se seguirá queriendo siempre....

     Y es que .... el corazón, atiende a razones, que la razón no entiende. 

   

   
   

 

14 comentarios:

  1. ¡¡genial!! (sobra todo comentario estaría de más)

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  2. Fantastico, SUSAN, magnífica historia, que nos ha podido ocurrir a cualquiera de nosotros, salvo en la narración impecable, que nadie puede contar como tú lo haces.

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    1. Gracias Ignacio.. es tan fácil, como contar las cosas tal y como nos salen. Un abrazo.

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  3. Susan, realmente me encanta como narras las historias. Esta fue una de esas, que me llevaron a un recuerdo de mi propia vida y es precisamente el libro que estoy escribiendo... Pronto nacerá y formara quizás parte de otros. Saludos

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    1. No solo aquí me estais diciendo, que esta historia os recuerda a alguna vuestra. En mi vida real, la 1.0 que se llama, conozco de muchos casos así. Y es que , como yo digo, hay una línea que cuando se cruza, no hay vuelta atrás. Saludos.

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  4. Mi comentario no es otro que:
    el corazón, atiende a razones, que la razón no entiende.
    Tú sabes mucho...

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    1. Sé de amar mucho, y no saber remediarlo. Un abrazo Javier.

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  5. Difícil de explicar. Sencillo de entender cuando te ha pasado.

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    1. Pues son cosas, que por lo que veo, pasan mas de lo que pensamos. Un beso.

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  6. ¡Qué me has hecho llorar! Una historia bonita y triste a la vez. Besooos

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    1. Pues ya lo siento por las lágrimas. Un saludo, y encantada. Besos.

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  7. La mejor historia de amor verdadero que he leído nunca. Amiga eres muy buena...

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