UNA SORPRESA

      Estaba ilusionada...... iba a verlo. Ese hombre conseguía sacar de ella, el lado mas libre y salvaje. Se sentía completamente abierta a hacer lo que quisiera, a proponerle todo.... a vivir el sexo, tal y como realmente lo sentía. Tenía la habilidad, de excitarla con una mirada... con una palabra.. o simplemente con su olor. Tan fácil como eso.

      No iba a tener muchas ocasiones para verlo, y quería que fuera especial. Quería preparar algo que él no se esperara.
 
      El día que habían quedado, cogió el tren temprano. Se sentó con cuidado en su sitio. Su falda era corta, y no quería enseñarle al pasajero que tenía enfrente, lo que llevaba debajo de la falda. Era demasiado provocativo como para ir publicándolo.
   
      En cuanto llegó al destino, él la estaba esperando. Ya se conocían desde hacía tiempo, pero aún así, aún se ponía nerviosa.
     En cuanto se vieron, se abrazaron con cariño y se dieron un beso. Y se fueron a tomar algo, a contarse que tal les iba todo.

      El reía y hablaba sin parar, y ella, al tiempo que le miraba, no podía dejar de pensar en lo que iban a hacer en un rato.

      Cuando acabaron la charla, cogieron un taxi. Tenían un buen recorrido...  Iban hablando... cuando ella... con esos ojos que la delataban... le dió en la mano, para que la mirara bien. Y con disimulo, para que el taxista no se diera cuenta, comenzó a subir la falda... de manera que él viera la media negra... el encaje del borde... y mas arriba.. las tiras del liguero.. asomando.... Ella lo hacía despacio, y él tenia la vista clavada en sus piernas... cada vez mas a la vista....
      Ella, al tiempo que se acariciaba... miraba el retrovisor, pendiente de que el taxista no la viera... Y él ... él  en ese momento... la miró con esos ojos vidriosos ... En ese momento, era como un demonio. Un demonio divino... descolocado en ese preciso instante.

      Con disimulo, cuando él ya se había percatado bien de lo que llevaba debajo...metió la mano entre sus piernas.... mientras le sonreía abriendo y cerrando las piernas con discrección... bajo la mirada absorta de él.   Ella sonreía sin parar... no podía evitar esa sonrisa de picardía, y mirarle con ojos llenos de deseo. Luego bajó su falda, despacio.... Ella también sabía ser cruel cuando quería.

      Llegaron al edificio, bajaron del taxi... y se fueron derechos al ascensor. Mientras bajaba el ascensor, estaban formales, mirándose. Ahí había fuego .. pero cerca había gente, por lo que se comportaron. Y en cuanto pudieron entrar al ascensor... nada mas cerrarse la puerta.. él la empotró contra la pared.. al tiempo que empezó a besarla salvajemente..

      . ¿Te gusta provocarme eh??? .. le decía mientras la tenía aprisionada contra la pared del ascensor, y le besaba el cuello, la boca...

      Ella ni contestó... no le dejaba...

      En cuanto llegó el ascensor al piso, salieron como si nada... Iban rápido y echando chispas los dos.... Abrieron la puerta del apartamento y entraron... No llegaron ni a la habitación. En la misma entrada la agarró fuerte, y mientras la pegaba a él con fuerza... la besaba y le abria la camisa ... Ella estaba completamente excitada y verlo a él agarrar su pecho... llevárselo a la boca... le hacía perder completamente el control.
   
     Iban desnudándose mutuamente por el pasillo , tirando la ropa por el suelo... y textualmente comiéndose... Y es que era uno de esos momentos, que ni un terremoto los hubiera frenado. Demasiado tiempo soñando con tenerse así... y el deseo les superaba.

      El la miraba ... al tiempo que no dejaba de abrazarla y sobarla por todo... y en cuanto la vió solo con la ropa interior, no quiso seguir desnudándola. Quería follarsela así.

   

       Esa mujer con cara de niña buena, le hacía descontrolar de una manera alucinante. Porque detrás de esa cara de buena, había una gran sorpresa.

       La agarró de la cadera y la apoyó de culo a él contra una mesa que había... El apenas la dejaba tocarlo, quería hacérselo sin contemplaciones. Y sobre la mesa, de espaldas a él.. le echó el tanga a un lado, se bajó los pantalones, la penetró sin contemplaciones y comenzó a hacerselo salvajemente... Justo encima de la mesa, había un espejo... Los dos se veían..
 
      La cogía del pelo mientras le daba fuerte... Le encantaba esa visión... su culo... el liguero... esas medias... esa mujer muerta de placer... Le daba tan fuerte, que creía que iban a hundir la mesa... hasta que ella, se dejó llevar....  Los espasmos del orgasmo casi le hacen caer...

      El la miraba triunfante, siempre conseguía que ella perdiera el control rápidamente... Pero tras haberla hecho a ella llegar a lo máximo, él estaba para explotar.
     Ella se giró... su mirada era vicio puro y entonces bajó.. a donde él quería.. Le encantaba llenarse la boca de él... Y comenzó a darle placer, de la mejor manera que sabía...

      Le encantaba saborearlo... metérsela hasta el fondo de la garganta, para luego , al tiempo que lo lamía, apretar sus labios y aspirar al sacarla... La notaba completamente dura en su boca... y como estaba tenso por el placer... Le oía resoplar y gemir sin parar...
     La ponía a tope oír los sonidos  que él emitía. Hasta que notó, como él comenzaba a temblar, y oyó como gemía.. fuertemente...
      Sentir como se vaciaba en su boca... y como él quedaba completamente relajado.... era increible.

      Le encantaba ese hombre... y con él , era libre...... Estaba convencida, de que le había gustado el encaje....

      Pero ahora le tocaba disfrutar de él... mas despacio... mas lentamente... y con cariño.