¿CONTAGIAS O CONTAMINAS?

    Esta mañana, venía pensando, en como las palabras que decimos, pueden influir en el estado de ánimo de los demás.

    Sé que no es ninguna novedad esto que estoy diciendo, pero sí sé, que hay personas, que en conjunto, contagian alegría.

   Hace unos dos años, hicimos un curso en la empresa, en el que básicamente, nos enseñaban a ser positivos, y a proyectar eso con las palabras, a los demás. Parece una chorradita, pero aseguro, que aprendí muchísimo.

   Y la verdad.... nos enseñaron muchas cosas, de las que no somos conscientes, en el día a día. Y entre ellas, a que somos espejos.

   Ellos nos decían.. ¿tu como eres? ¿contagias o contaminas?.

  . Contagioso, es ese tipo de persona que por norma general es alegre y positivo. Y cuando está cerca, te contagia esa alegría. Ya sea por sus palabras, por la expresión de su cara, o por como proyecta en los demás sus situaciones.
    Estas personas, cuando tienen que transmitir algo negativo, tratan de hacerlo de manera, que hagan el menor daño posible. Incluso haciendole ver al otro, que de todo lo negativo se aprende, y es un empuje para aprender y mejorar.

    Normalmente, los que  están dentro del grupo de los contagiosos,  desarrollan las patas de gallo, jajajaja, y es porque su gesto normal suele ser agradable y bastante sonriente.

    . Contaminante, es aquel, que por norma general, es negativo. Solo ve lo malo de las cosas y de las demás personas. Es aquel, que parece una sota, como yo digo ... y que no se acuerda de lo sano que es  sonreir. Es aquel , que siempre malmete a los demás, y que disfruta contando penas.
    Además, cuando tiene que transmitir a alguien alguna noticia negativa, la disfraza mas negra aún, porque se sube viendo como el que está enfrente se hunde.
 
     Su simple presencia, aunque no hable, te baja el ánimo.

     Igual que las personas contagiosas, suelen desarrollar las patas de gallo, los contaminantes desarrollan, el llamado código de barras. Y son esas arrugas que salen en el bigote, de tener el morro todo el día torcido.

     Lo que está claro, es que nadie es perfecto. Todos tenemos momentos contagiosos y momentos contaminantes. Pero nos define el porcentaje.

     Osea, que no está de mas que nos autoevaluemos..... Y recordad, que somos espejos. Si sonries y eres amable con la persona que tienes enfrente, raramente te va a responder con un rebuzno. Pero si de entrada, le entras a los demás, con malas maneras, solo recibirás malas maneras.

     El que siembra ... recoge... Y a todos nos gusta recoger amabilidad y cariño... Claro, salvo que seamos cardos seteros.

     ¿Y tú como te ves?? ¿contagias o contaminas? ...